“Hay que disfrutar cada día mientras estamos vivos, sin importar cuánto va a durar nuestra existencia”. Eclesiastés 11:8 (PDT)

¡Los niños necesitan divertirse!

¡Las familias deberían ser divertidas! El hogar debería ser un lugar divertido. Este es un gran problema en muchas casas, donde los padres son buenos padres y cuidan de sus hijos, pero no tienen suficiente diversión, están muy ocupados.

Llegan a la casa con una lista de trabajo para realizar, después de su jornada de trabajo y todas estas cosas las tienen que terminar y simplemente no tienen tiempo para la diversión.

¿Aguantas a tus hijos o realmente los disfrutas? Ellos necesitan diversión.

“Hay que disfrutar cada día mientras estamos vivos, sin importar cuánto va a durar nuestra existencia” Eclesiastés 11:8 (PDT).

Cuando mis hijos estaban creciendo teníamos lo que llamábamos “El viaje misterioso y mágico de Papá” Periódicamente cambiaba la rutina y decía, olvidemos la rutina; vamos a divertirnos. Despertaba los niños a medianoche, los montaba en el carro y hacía algo divertido. ¿Y qué si perdían un día de escuela? Iban a recordar esto siempre, recordarían que los despertaba en la madrugada y que les hacía de comer tostadas francesas pintadas de verde.

¡Diviértete con tus hijos!  Disfrútalos. Un día fuera de la rutina no arruinará sus vidas; pero una loca y divertida aventura les dejará recuerdos que nunca olvidarán en sus vidas.

Si no estás celebrando y divirtiéndote con tus hijos en casa, no te sorprendas cuando más adelante en la vida decidan pasar menos tiempo en casa. Si no los disfrutas ahora, no te extrañe que en el futuro no quieran pasar tiempo contigo.